Dominar el inglés ya no es solo un valor añadido en el currículum. Hoy, se ha convertido en un requisito imprescindible para acceder a universidades internacionales, programas de intercambio, oportunidades laborales y procesos de inmigración en países de habla inglesa. Obtener una certificación de inglés válida y reconocida puede marcar la diferencia entre avanzar profesionalmente o quedarse atrás.
Sin embargo, no todas las certificaciones son iguales ni sirven para los mismos fines. Dependiendo del país, el objetivo (académico o profesional) y la institución de destino, necesitarás preparar un examen concreto. Por eso, es importante saber cuál se ajusta mejor a tus necesidades y cómo puedes prepararte adecuadamente para superarlo.
Tipos de certificación de inglés más demandados
Existen varios exámenes oficiales de inglés reconocidos a nivel internacional. Cada uno tiene características específicas, tanto en su estructura como en su enfoque. Algunos están más orientados al ámbito académico, mientras que otros son más útiles en contextos laborales o migratorios.
El IELTS (International English Language Testing System) es uno de los más solicitados para quienes desean estudiar o emigrar a países como Reino Unido, Australia o Canadá. Ofrece dos versiones: una académica y otra general. La puntuación se mide en una escala de 0 a 9 y tiene una validez de dos años. Las universidades suelen exigir un resultado mínimo entre 6.5 y 7.5.
Otro de los certificados de inglés ampliamente aceptado es el TOEFL (Test of English as a Foreign Language), especialmente en instituciones de Estados Unidos. Evalúa la capacidad de entender y usar el inglés en un entorno académico universitario. La puntuación máxima es 120, y muchas universidades requieren entre 80 y 100 puntos para el ingreso.
También está la familia de exámenes de Cambridge, que incluye niveles como B2 First, C1 Advanced y C2 Proficiency. Estos certificados no caducan y son reconocidos en todo el mundo, tanto por universidades como por empleadores. Están especialmente recomendados para quienes desean demostrar un dominio permanente del idioma.
Por último, el test Linguaskill, también de Cambridge, ofrece resultados rápidos y flexibles, ideales para empresas o instituciones que necesitan evaluar el nivel de inglés de sus candidatos o empleados de forma ágil y fiable.
¿Qué certificación de inglés elegir según tus objetivos?
La elección de la certificación de inglés adecuada depende, en gran medida, del propósito que tengas. Si tu objetivo es acceder a una universidad en el extranjero, deberás verificar qué examen aceptan en la institución concreta. Muchas universidades del Reino Unido prefieren IELTS, mientras que en Estados Unidos predomina el TOEFL. En países como Canadá o Nueva Zelanda se aceptan ambos, aunque en ocasiones también se reconocen títulos de Cambridge.
Para trabajar en el extranjero, es habitual que las empresas soliciten pruebas de nivel como IELTS General o Cambridge B2 o superior, según el puesto. Algunas profesiones reguladas, como medicina o derecho, pueden exigir puntuaciones específicas en determinados exámenes para acreditar la competencia lingüística necesaria.
En procesos de inmigración, países como Australia y Canadá integran la puntuación obtenida en el IELTS en su sistema de puntos para solicitar visados. Por tanto, elegir la certificación de inglés correcta y obtener una buena nota puede facilitar el acceso a estos procesos.
Además, no todas las certificaciones evalúan las mismas competencias con igual intensidad. Algunas ponen más énfasis en la comprensión auditiva, mientras que otras valoran especialmente la expresión escrita o la fluidez oral. Conocer tus puntos fuertes y débiles es esencial para decidir qué examen prepararte.
Prepararse bien marca la diferencia
El nivel de exigencia de estas pruebas requiere una preparación específica. No basta con tener un buen nivel general de inglés. Es necesario familiarizarse con el formato del examen, practicar con simulacros reales y desarrollar estrategias para cada parte. Esto te permitirá alcanzar los resultados que necesitas en el menor tiempo posible.
Además, los exámenes oficiales suelen tener un enfoque muy estructurado, lo que significa que una preparación autodidacta puede no ser suficiente si no se sigue una metodología eficaz. Por eso es recomendable contar con profesionales que te acompañen en todo el proceso.
Desde SEÏF, te ayudamos a alcanzar tus metas internacionales. Ya sea que necesites una certificación de inglés para estudiar o trabajar en el extranjero, ponemos a tu disposición clases presenciales en Madrid con profesores expertos, grupos reducidos y una metodología centrada en tu objetivo. Evaluamos tu nivel, te orientamos sobre qué examen te conviene más y diseñamos un plan de estudio personalizado para maximizar tu rendimiento.
En SEÏF, creemos que una buena preparación es la clave del éxito. Sabemos que cada estudiante es diferente, y por eso te ofrecemos el acompañamiento necesario para que consigas la certificación de inglés que necesitas para estudiar o trabajar en el extranjero.